Si queréis darle un toque antiguo a vuestro hogar pero no tenéis tiempo ni dinero para ir en busca de muebles viejos o reformados, podemos enseñaros cómo hacerlo, de la manera más fácil y sencilla, enseñándoos a utilizar la técnica del craquelado para vuestros muebles de madera u otros detalles del mismo material. Con poco esfuerzo habréis renovado cualquier habitación.
¿Qué necesitamos?
- La madera a tratar.
- Cola sintética.
- Pintura que combine con color base del mueble y brocha.
Recordad, que las grietas que saldrán serán del color base de la madera, así que si tenemos un mueble blanco, las grietas serán blancas y si lo tenemos naranja, saldrán naranjas. Con eso queremos aconsejarte que pienses bien que pintura querrás utilizar para pintar de nuevo tu mueble ya que la combinación de ambos colores será clave para que encaje en la decoración de tu hogar.
Primero prepararemos la madera con un trapo húmedo, secándola después para proceder a aplicarle la cola sintética (en el caso de que quieras también cambiar el color base de tu mueble, dale una mano de pintura y deja que se seque por completo antes de proceder a aplicar la cola).
Si no tienes cola sintética, puedes usar cola blanca ordinaria, pero deberás mezclarla con agua (10 partes de cola por 1 de agua). Mientras apliques la cola recuerda hacer brochazos de distintos tamaños y capas para que salgan todavía más irregulares las grietas.
El momento clave es decidir el momento de empezar a aplicar la capa de pintura. Para que el craquelado funcione debemos aplicar esa capa justo cuando la cola esté medio seca. El momento exacto será cuando ya no la veas líquida.
Aplica la capa de pintura y deja que se seque al sol. Poco a poco irás viendo las grietas y descubriendo cómo ha quedado tu craquelado. Si quieres ayudar al proceso y tener más control sobre él, usa un secador de pelo a 25 centímetros de distancia, irá mucho más rápido y en poco tiempo tendrás tu mueble o detalle antiguo hecho por ti mismo.
Fotos: Madera-fina, Angelic Crafts, La casa de los Martínez.